• Los usuarios pierden una media de 18 artículos día, sobre todo carteras, llaves, mochilas, DNI, gafas, distintos carnés, móviles y paraguas
• El protocolo de actuación establecido consigue que los dueños recuperen el 19,97% de sus enseres, que es inmediato si se trata de objetos de valor

Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) recogió durante el pasado año un total de 6.824 objetos perdidos por los usuarios de Metrovalencia. Estos datos suponen que se olvidan 18 objetos de media al día y 568 por mes, que son guardados como mínimo un mes en las estaciones donde se custodian y un mes más en las instalaciones de València Sud. Transcurrido dicho periodo de tiempo, y si sus dueños no lo han reclamado, se entregan a la Policía Local de Valencia.

Los objetos que más aparecen en los metros y tranvías de Valencia y su área metropolitana son, por orden numérico, carteras (982), DNI (824) llaves (499), mochilas (424), gafas (299), distintos carnés (pasaportes, permiso de conducir, tarjeta sanitaria…) (295), móviles (254) y paraguas (56).

Pero estos artículos no se hallan de manera homogénea durante el año, sino que existen épocas propicias para perder determinados objetos. De esta forma, en diciembre y enero, el personal de FGV encuentra más tarjetas bancarias por las compras de Navidad; en marzo, por las Fallas, cualquier tipo de objetos; en mayo, con la llegada del buen tiempo, las gafas de sol aparecen en los asientos vacíos, y, en octubre, cuando el mal tiempo hace su aparición, los paraguas, bufandas y guantes tienen que ser retirados asiduamente.

En cuanto a los meses que más objetos se pierden, marzo, con 795, encabeza un listado al que enero, con 631, y noviembre, con 609, le secundan en los tres primeros puestos. Les siguen diciembre, con 583; junio, con 579; febrero, con 572; mayo, con 555; septiembre, con 535; octubre, con 534; abril, con 530; julio, con 496; y agosto, con 405.

Gracias a los protocolos establecidos por FGV para la gestión y custodia de objetos perdidos, la recuperación de un objeto por parte de su dueño durante el periodo que está registrado en FGV se cifra en un 19,97%, lo que en 2023 ha supuesto 1.363 objetos. El porcentaje restante es entregado a la Policía Local de Valencia o trasladado a un punto verde o de reciclaje, si se trata de objetos en evidente estado de desgaste o deterioro.

En cuanto al tiempo que se tarda en recuperar un artículo, varía si existe algún elemento identificativo o el cliente lo reclama; si es así, especialmente cuando se trata de un objeto de valor, se suele retirar incluso la misma jornada de su pérdida.

Procedimiento a seguir

Las estaciones con Espai del Client (Colón, Xàtiva y Alacant), el Centro de Atención del Cliente de Benimaclet, y los Punt del Client (Àngel Guimerà, Empalme y Mislata) son los puntos de entrega y de recogida por parte de los usuarios en una primera fase, antes de ser trasladados a la sede central de València Sud.

Transcurrido un mes, los objetos son recogidos y llevados a una dependencia de València Sud para intentar localizar al dueño, dar de baja para su reciclaje según su estado o bien entregarlos a la Oficina de Objetos Perdidos de Valencia transcurrido otro mes. Se distinguen los objetos de valor para darles un trato especial en la cadena de custodia, acompañando fotografías y utilización de caja fuerte.

Los documentos oficiales (DNI, pasaportes, etcétera), son entregados a la policía en la mayor brevedad para intentar localizar a su propietario. Las tarjetas bancarias son destruidas a fin de no ser manipuladas, evitando riesgos innecesarios. El resto de objetos que permitan localizar a su propietario, se realizan seguimientos y pequeñas investigaciones por parte del personal de Atención al Cliente para conseguir entregarlos.

En cuanto al dinero en metálico recogido de carteras, bolsos o monederos que no ha sido recuperados por sus dueños, FGV los entrega a entidades benéficas para ayudar a sufragar sus gastos.

Además, en la actualidad, FGV colabora con la organización Corazones de África para que, una vez cumplida la normativa de plazos de la empresa pública, se les entrega ropa, libros infantiles, muletas, bastones, juguetes, mochilas y otro tipo de objetos susceptibles de ser aprovechados por la citada asociación.

Objetos sorprendentes

Además de la pérdida de objetos habituales, como los citados anteriormente, llama la atención una serie de artículos que cuesta creer que los usuarios se olviden, como bicicletas, muletas, maletas, dosis de insulina, carros de bebé, sombreros, sombrillas, gorras, cámaras de fotos, disfraces, uniformes de todo tipo, botas de seguridad, recetas, medicamentos, pantallas, ordenadores y tabletas, neveras portátiles e informes médicos.

También sorprende que se olviden décimos de lotería, denuncias de la Guardia de Civil y del Juzgado, justificante de apuestas deportivas, billetes de loterías, quinielas, libros electrónicos y de papel, cascos de motos, discos de vinilos y hasta zapatos, aspiradoras y bastones de ciegos.